Friedich Heinrich Karl Harmaan nació en 1879 en la ciudad alemana de Hannover y fue el sexto hijo de una familia humilde, de pequeño le gustaba jugar con los juguetes de su hermana, eso añadido a su timidez y la mala cabeza para los estudios llevó a sus padres a proponerle ingresar en una academia militar cuando cumplió dieciséis años.
Fritz se adaptó pronto a la academia pero pasado un año empezó a sufrir ataques, fué considerado no apto y le dieron de baja en el ejército.
Ya de civil Friedich regresó a Hannover y empezó a trabajar en una fábrica de tabaco y también su carrera criminal, ya que apenas cumplido dieciocho años lo arrestaron por pedófilo, aunque el informe psiquiátrico consiguió que se librase de cárcel enviándolo a un hospital mental de por vida.
Apenas llevaba seis meses cuando en un descuido de los celadores escapó del psiquiátrico huyendo a Suiza dónde se estableció y trabajó durante dos años hasta que regresó a Alemania, dónde intentó volverse a alistar en el ejército bajo un seudónimo, en la revisión médica lo dieron por no apto y regresó a la casa de sus padres que le proporcionaron trabajo en el pequeño negocio familiar.
Anteriormente Fritz había abusado sexualmente de varios niños, pero dónde se desata el asesino que llevaba dentro fue a principios del siglo XX y entre 1918 y 1924, asesinó a veintisiete personas .
Su primera víctima Friedel Rothe de diecisiete años que desapareció en septiembre de 1918, los amigos de la víctima dijeron que la última vez que lo habían visto, iba acompañado por Friedich; la familia del joven acudió a la policía y pidieron que buscasen a su hijo en casa de Fritz, así lo hicieron, pero lo que encontraron era un adolescente desnudo en la cama del asesino y no había ni rastro de Friedel; fué acusado por segunda vez de abusos sexuales a menores y volvió a la cárcel dónde cumplió una condena de nueve meses de arresto; durante ese tiempo conoció a Hans Grans, se hicieron amantes y una vez cumplida la condena se mudaron juntos a un apartamento.
Casi todas las víctimas del vampiro de Hannover eran jóvenes marginados a los que convencía para que le acompañasen a su apartamento, y una vez ahí los mataba seccionándoles la carótida de un mordisco mientras los sodomizaba; después los descuartizaba y vendía la carne en el mercado negro como comida para animales, de los huesos se deshacía tirándolos al río Leine, siendo cómplice pero no asesino su amante Hans.
De una forma casual, la policía encontró en el río huesos pertenecientes a veintidós personas, los agentes empezaron a hilar y entre las detenciones de Fritz por abusos sexuales, la desaparición de Friedel Rothe y la fama que tenía de molestar a los muchachos con proposiciones obscenas, concluyeron que muy posiblemente Friedich hubiese cometido esos asesinatos, así es que pusieron un patrulla de vigilancia para controlarlo en secreto.
En el mes de junio, el vampiro intentó engañar a un adolescente convenciéndole para ir a su apartamento y fué de nuevo detenido pero antes de llevarlo a la comisaría fueron a su casa dónde las paredes y muebles tenían restos de sangre; al preguntarle de dónde procedía él respondió que a un trabajo ilegal como carnicero.
Pero los agentes que registraron la casa a fondo, encontraron ropas y pertenencias de algunos de los desaparecidos y ante la evidencia se disipó cualquier duda que pudieran albergar sobre la inocencia de Fritz.
Durante el juicio el vampiro de Hannover confesó haber matado a cinco jóvenes más de entre trece y diecinueve años; fué declarado culpable y condenado a morir guillotinado; Hans, su amante solo cumplió doce años de arresto porque Fritz escribió una carta donde aseguraba que él nunca participó en los crímenes.
La cabeza de Friedich fué conservada para estudiar su cerebro.
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